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Wu Ming 1

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  • marteцитує4 роки тому
    El hombre blanco es capaz de hallar a una persona desaparecida en China. Mandan a la CIA hasta China para encontrar a alguien. Mandan al FBI a cualquier parte para encontrar a alguien. Pero no logran encontrar a nadie si el criminal es blanco y la víctima es negra. No esperemos ya que el FBI busque a los criminales que disparan y tratan a nuestra gente con brutalidad. Encontrémoslos vosotros y yo. Y os digo que es fácil hacerlo.

    Malcolm X, 28 de junio de 1964.
  • marteцитує4 роки тому
    En lengua Yoruba, Ekundayo significa ‘la pena se convierte en alegría’.
  • marteцитує4 роки тому
    HEAVY LEGS. Después de un tiempo aparecieron, en Nueva York y Chicago, músicos negros que querían complacer a los críticos blancos, en las entrevistas citaban a Stockhausen, Webern, Varése, Schoenberg y otros teutones cuyo nombre no recuerdo. También Ornette, todas sus parrafadas incomprensibles, la “música harmolódica”, hasta él compuso sinfonías, sonatas, ésas cosas. Quería que lo tomaran “en serio”. Si hubo gente que ha tocado para los intelectuales blancos, ésos son los del free. Mucho de todo eso era una mierda, en un momento todos pensaban que se podía improvisar horas y horas, nada de beat, nada de línea del bajo, nada de saber tocar, y se creían grandes, radicales de veras, como los peques que se tiran pedos y eructan para fastidiar a su madre. Esas cosas fueron un mazazo para el jazz. Los empresarios no querían ni hablar y los hermanos no compraban esos discos, ¿y por qué iban a hacerlo? Si quieres oír gente cabreada que pega bocinazos, puedes asomarte a la ventana en hora punta.
  • marteцитує4 роки тому
    BLOOD WILL TELL. Butoba MT5, manufactura alemana. El famoso Butoba de Sonia Langmut.
  • marteцитує4 роки тому
    Años más tarde, cuando tipos como Albert Ayler decían que querían ir más allá de las notas para concentrarse en los sonidos, entendía muy bien lo que querían decir. Ayler y su mujer, a finales de los años sesenta, se iban a tocar al Prospect Park. Una tarde la policía hizo que pararan porque había una buena bullanga. Estaban a punto de detenerlos. Todo eso no lo vi, por entonces ya estaba en prisión.
  • marteцитує4 роки тому
    “no puedes odiar las raíces sin odiar el árbol”
  • marteцитує4 роки тому
    LET’S-PLAY-A-GAME. He cambiado de nombre tantas veces. Fui “Africano” y “negro”, que en español se entiende pero no en inglés. Luego fui “de color”. En los años veinte volví a ser “negro” pero con mayúscula. “Negro”. Sólo que los blancos no pronunciaban nee-grow sino nigrah, que sonaba casi como nigger y tenía que esperar hasta la segunda sílaba para saber si me estaban insultando. Por otra parte, nigger era una deformación de “negro”. ¿Cómo se traduce nigger en italiano? “Negro”. ¿Y cómo se traduce “negro”? “Nero”. Pues eso, que es un follón. A mediados de los sesenta me convertí en black: “Say it loud, I’m black and I’m proud!” En español siempre había sido de ese color, pero en inglés era distinto. Aceptar lo negro de la piel y del pelo, superar el complejo de inferioridad: “es bello ser black ”. Con todo, a veces me llamaba “Afroamericano” o “Africano Americano”. Los blancos ya no tenían idea de cómo tenían que llamarme. Aparte de “nigger”, claro. Tampoco los hermanos, ni siquiera ellos sabían cómo llamarse: los viejos eran “de color”, los de media edad o clase media eran “Negros”, los más jóvenes y militantes eran “blacks” o “Afroamericanos”. Mientras tanto, entre nosotros seguíamos llamándonos nigger, es más, nigga, pero no como cuando lo dice un blanco. O mejor dicho, a veces sí y a veces no. Es un follón, hombre, ya te lo he dicho.

    Hoy hay quien me llama “Africano de la diáspora”, o “Africano” y punto. Después de cuatrocientos años, el círculo se cierra.

    GREEN MAN. Trane tocaba cada nota de blues como si Dios la llevara en palmas, y pensar que los críticos blancos –y todos los críticos eran blancos– lo llamaban “anti-jazz”. Junto a Miles ya se había lanzado a las improvisaciones modales, a lo Kind of Blue, improvisaban libres de las habituales progresiones de acordes, libres, después Trane formó el cuarteto “clásico”: él al saxo, McCoy Tyner en el piano, Jimmy Garrison al bajo, Elvin Jones en la batería. La mejor máquina musical que jamás haya visto en acción. Al final traspuso las notas, de su saxo salían rebuznos aullidos chillidos mugidos rugidos ladridos, Madre Naturaleza se quitaba de encima la música de los blancos con sus coqueterías de mierda. Nuestra música eran las voces de los babuinos y de los macacos, era un gibón que grita colgado en la rama. El jazz libre.
  • marteцитує4 роки тому
    Si Dios existe, tiene que ser un honker de la vieja escuela, tipo Bull Moose Jackson, Eddie Chamblee, Jim Conley, Wild Bill Moore... Estoy seguro, tiene un traje blanco reluciente y toca un saxo tenor.
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