Los corruptos reaccionarios que controlaban la corte del zar se propusieron destruir Rusia con el fin de concertar una paz por separado con Alemania. La falta de armas en el frente, que había causado la gran retirada en el verano de 1915, la escasez de víveres en el Ejército y en las grandes ciudades, el colapso de las manufacturas y el transporte en 1916, todo ello, como sabemos ahora, formaba parte de una gigantesca campaña de sabotaje, que fue frenada a tiempo por la Revolución de Marzo