Kirill se quedó duro como una piedra, como un diamante; soltaba un arcoíris de luces primerizas en cualquier dirección, como si acabara de ser pulido y no dominara todavía el resplandor de sus facetas
R Güemesцитує9 місяців тому
Plegarias atendidas, del autor norteamericano Truman Capote
kokoritaцитує3 роки тому
soy afuera-afuera y vos afuera-adentro, siempre en espiral. Por eso nos llevamos bien”.