Ontológicamente, el riesgo y la patología es confundir la doctrina del mundo, la cosmogonía, con la extensión de uno mismo: un delirio de omnipotencia. Sin embargo, reconocer en cada objeto una gemela potencial, o un gemelo potencial, es exactamente lo contrario de la voluntad de apropiación o dominación. No se trata de proyectar nuestra personalidad sobre él o ella, sino, por el contrario, de comprometernos a hacer de cada objeto o de cada cuerpo una fuente de autoconocimiento.