Esta obra se centra en el registro de los senos frontales como herramienta para estudiar aspectos de la conformación biológica, además de la discusión sobre el tratamiento del cadáver y el culto a los ancestros entre los antiguos teotihuacanos. Se analizaron numerosos restos óseos humanos modificados y convertidos en diversos artefactos hallados en una gran variedad de contextos arqueológicos; una tercera parte de la muestra consistió en frontales y cráneos, los cuales parecen haber sido manipulados ex profeso.