A través de las experiencias vividas por Óscar Martínez, que pasó trece años cubriendo una de las esquinas más violentas del planeta, se cuenta un mundo. Y ese mundo, que es el nuestro, es un mundo sobre el que casi nadie quiere oír. El lector tiene en sus manos un texto brutal y necesario, que reflexiona sobre los riesgos, la ética y la necesidad del oficio de periodista.